lunes, 23 de abril de 2007

¿De qué hablan las monjas?

En un trayecto de 20 minutos a lo largo de la violacea línea 9, una monja es capaz de sacar más historias y comentarios que todo el resto del vagón. Y yo me pregunto: si una monja no vive ni se interesa por la televisión, los grandes acontecimientos, los vicios ni los placeres terrenales, ¿de qué habla? Como es habitual, una, que iba iPodatronadísima, no se enteró de la conversación, pero tras esa pasión y ese empeño por expresarse tiene que haber razones de peso... o razones de limbo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si seguro q esa era como la d la foto,q mira internet a menudo,la tv,si hay monjas q hasta van al fútbol,y son forofas!!!!!imagínate rezando xa expiar los insultos q le han regalado al árbitro.Eso sí es una faena lo del limbo,ya tenía un solar reservadito allí,me iba a colar aunque esté bautizado,seguro q lo han recalificado...maldito pocero!!!!!