miércoles, 31 de enero de 2007

Power Out

Aprovecho hoy para publicar un interesante e-mail que recibí ayer a la vez que recomiendo una gran canción, que viene muy al caso y que a algunos os puede presentar a un gran grupo que -a mi pesar- ya se ha convertido en "otro grupo de moda".

Porque la causa cuenta con mi apoyo incondicional, mañana ni siquiera habrá actualización. Lo dicen los Arcade Fire y lo digo yo también: Power Out!

El día 1 de febrero de 19:55 a 20:00 h, se propone apagar todas las luces para darle un respiro al planeta (la propuesta viene de Francia). Si la respuesta es masiva, el ahorro energético puede ser brutal. Solamente 5 minutos, y a ver qué pasa. Sí, sí, ya sé que estaremos 5 minutos a oscuras con cara de tontos, pero recordad que internet tiene mucha fuerza y podemos hacer una cosa grande. Y ¡¡pasad la noticia!!

Para más información y para quien sepa francés, un click: http://www.lalliance.fr/

De Condoleezza a Condorisa

Hay una serie de elementos en mi vida que -sin llegar a darme cuenta- han compuesto por sí solos un Top 10 de "cosas que me gusta ver pero que no por ello me gustan en sí mismas".

Me ocurre, por ejemplo, con esta gran foto y su correspondiente gran son-risa, que hace tiempo que guardo, abro, miro y disfruto porque, a veces, todo está dicho con una buena imagen o con una mejor son-risa.

Por eso, hoy habla ella, no yo. Pero ¡que a nadie le dé la risa!

sábado, 27 de enero de 2007

El síndrome de El Aviador

Me advierte mi amigo Álex con sabias palabras de que “Madrid es un lugar sucio” y tiene toda la razón del mundo. Por eso, para este nuevo 2007 -que para mí aún está a punto de empezar- y debido al agudo “síndrome de El Aviador” que padezco, un mundo nuevo de higiene y libre de toxinas se abre ante mí gracias a la maravillosa existencia de las incombustibles toallitas higiénicas.

Las toallitas higiénicas o “toallitas de bebé” son esas adorables compañeras que -imitando que no ridiculizando a la hija de Marisol en “El otro lado de la cama”- se pueden transportar en el neceser, en la mochila, en el bolsillo, en la carpeta, en el bolso... y siempre, siempre, deben estar presentes en lo más profundo de la dignidad y la pureza interior de una.

Porque me podrán obligar a olvidarme de las suelas de los zapatos, pero no a disfrutar de una buena comida o de un tierno apretón de manos, ¡¡toallitas higiénicas, siempre!!

El poder de las cosas sencillas

1. Martita, mi compa y amiga en SER Torrelavega ha disfrutado del placer de verme otra vez.
2. Cine a 2€ (thanks to Torrelavega-Power-2007).
3. He aprendido la mitad del proceso de hacer una complicada y amarilla señora tortilla de patatas.

Hoy ha sido un gran día. Reparto de besos para todos.

viernes, 26 de enero de 2007

La vida en una maleta

En tiempos como éstos en los que la vida nos parece cambiar de un día a otro, nada mejor que estar siempre preparados, con la mano apretada bien fuerte contra el asa y todos los sueños dentro de la maleta. Por si acaso.

Porque nunca sabemos cuánto nos cabrá, cuánto nos llevamos ni cuánto dejamos atrás cuando con un chás, echamos el cerrojo y nos vamos, con poco espacio en la maleta pero muchos huecos por dentro.

Ojalá siempre estuviéramos listos para salir disparados. Con la vida en una maleta. Enhorabuena, Álex.

jueves, 25 de enero de 2007

Los vecinos

Mucho se ha escrito sobre los "adorables compañeros de al lado", "tus vecinos, tus amigos", etc., así que no vamos a perder tiempo en repetir cosas que ya se han dicho... Pero es que hoy a mí me han dicho algo que nunca me habían dicho. Sí, señores, esta mañana, "mis vecinos, mis amigos" me han acusado de escuchar anoche una música que no estaba escuchando a un volumen al que no estaba volumizando. ¿Será cierto? ¿Será que mientras duermo yo misma doy un concierto? ¿O será que mi padre ensayaba a horas poco cristianas para su concurso de karaoke con más dedicación que acierto?

miércoles, 24 de enero de 2007

Un músculo como otro cualquiera

El gimnasio. Ir o no ir, ésa es la cuestión. Tantas ganas, tantos euros, tantos propósitos y tantas veces que terminamos -como hoy- en casa, sientiéndonos culpables y un poco pasaditos después de los excesos de la Navidad, rememorando viejos éxitos de Tori Amos y ejercitando la garganta, un músculo como otro cualquiera.

Todo lo que toco lo taconeo

Después de muchos meses de botas, zapatillas y pelotas desgastadas, lo dejo todo y lo cambio por lo único que me sienta bien. Vuelvo a ponerme los tacones. Vuelvo a salir. Vuelvo a no volver siempre al mismo sitio. Voy a mi sitio. Me voy a Madrid.