martes, 29 de enero de 2008

Vuelta y media

O cuarto y mitad. Todo diversión sin ver los Monegros, habiendo conducido y sin gotica de agua. Una pena que los cuerpos radiofónicos no estén como para ponerse en exposición.

Mañana, bajamos la cremallera y cruzamos los dedos. Y, entonces, vemos lo que pasa: si es todo muy grande o si es un auténtico desastre.

No hay comentarios: