Apareces alto y vestido de azul, que hay que es tu color más habitual. Te mueves, hablas con tono ronco y fuerte y siempre me da la impresión de que cantas la misma canción.
Me ves y esperas inmutable a que me acerque a ti. A veces me recibes amable y tranquilo, otras juguetón y divertido y otras, simplemente amenazante. Sé que soportas a mucha gente a lo largo del día, pero yo nunca te fallo, así que trátame bien.
Nunca me lees, ni me escribes, y creo que incluso te molesto a veces, cuando me empujas sin que me lo espere y sigues a lo tuyo o hablando con otra gente y actuando como si no hubiera pasado nada. Pero no me eches, que he sido yo la que ha venido a verte.
Hoy estás enfadado. Te lo he notado desde el principio. Te miro y te veo igual, si acaso, un poco más viejo, un poco más aburrido, un poco más cansado pero, sorprendentemente, con la misma vitalidad que el día en que nos presentaron. Mis padres. Tiene gracia. Y aquí seguimos, tú y yo.
Liencres, 23 Julio 2007
3 comentarios:
nada de desvelar secreto, Ivi, pero supongo que te acabo de nombrar mi lector más aventajado...!
Con humildad acepto semejante título! Prometo ser una tumba y no decepcionarte!
Holita Purpupeich. Desde mi piso granadino con muebles viejos, patio de luces (nunca sabré por qué lo llaman así cuando es oscuro y huele a asados), compañera malotilla, compañero hippiolo y algo paradillo, lleno de tabaco y de polvo, te saludo.
Espero verte antes de venirme en plan en serio. Me recibirás? O te molesto? ;P
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